Aunque los titulares de los principales medios de comunicación local
den más cabida a problemas políticos y económicos que dominan la
realidad del país y con ellos se reste a la alegría que caracteriza al
dominicano, la población hoy tiene una buena noticia para celebrar que
la prevalencia de la desnutrición infantil crónica en República
Dominicana ha disminuido del 16.5% (1991) a 6.9% (2013).
La estadística está contenida en la última Encuesta Demográfica y
de Salud (Endesa). En tanto el informe ‘El Estado Mundial de la
Infancia 2019: Niños, alimentos y nutrición’, de Unicef revela que la
desnutrición en niños dominicanos menores de seis meses es de 6,8%.
Que se debe seguir trabajando, no para reducirla, sino para
erradicarla, es cierto, pero las cifras dicen que el país va por buen
camino respecto al tema. Ante esta realidad, el nutriólogo Federico
Ramírez López sostiene que este resultado ha sido producto de los
grandes esfuerzos que realizan organismos nacionales e internacionales
para proporcionar mejor estilo de vida a los pequeños, así como el
trabajo que hacen otras entidades para ofrecer a la mujer embarazada
mejores condiciones alimenticias durante la gestación.
“Esto porque como bien especifica el informe de Unicef, las madres
con malnutrición tienen más riesgo de que sus hijos también la
presenten. ¿Qué se quiere dejar claro con esto? Sencillo. No es bien
alimentar al niño desde que nace, sino preparar a la madre para evitar
el problema”, explica.
El experto sostiene que es claro que se ha trabajado con la
alimentación de los niños desde su nacimiento para lograr bajar la
incidencia de desnutrición en el país, “pero realmente la prevención del
problema y que sigamos avanzando depende de la buena alimentación de la
madre. Que esté en óptimas condiciones, que lleve un embarazo sano”.
Búsqueda de soluciones
Ramírez López corrobora que es necesario reducir en ellas la anemia
cuando están en edad fértil, porque según las cifras, comenta, la
deficiencia de hierro ha aumentado en el país del 26% al 30%, al igual
que ocurre a nivel global y en América Latina y el Caribe.
Está de acuerdo con lo que expresa Rosa Elcarte, representante de
Unicef en República Dominicana, quien entiende que “se requiere la
creación de nuevas leyes y el compromiso de la empresa privada para la
fortificación de alimentos y regular los contenidos en azúcar, grasas y
sal de los alimentos, así como la publicidad de esos alimentos dañinos a
la salud”. Con esto se refiere a la mujer.
Elcarte añade: “Para mejorar la nutrición de todos los niños desde la
primera infancia es necesario que este derecho se coloque en el centro
de las políticas públicas, así como reforzar el cumplimiento de leyes
que ya existen en el país como la que regula la comercialización de los
sucedáneos de la leche materna”.
Orientación y trabajo
Según el nutriógo, el país está en un momento de celebración por la
reducción de la desnutrición infantil: “Pero ojo, esto no quiere decir
que ya llegamos donde íbamos. No señor, ahora es que falta. Tenemos que
orientar a la mujer para que durante el embarazo se alimente bien, y
como valor agregado sepa reconocer las señales que le dicen que su hijo
está desnutrido. Entre ellas podemos citar que presentan vientre
hinchado, llanto, inactividad, atención dispersa, resequedad y
descamación de la piel”.
CIFRA
6.8%
Reducción en cifras
Del 16.5 %, en 1991, la desnutrición en el país ha bajado a un 6.8 % en este año 2019. En 2013, estaba en 6.9. Un experto en el tema asegura que podría continuar bajando si se toman los controles necesarios a partir de la madre.
Del 16.5 %, en 1991, la desnutrición en el país ha bajado a un 6.8 % en este año 2019. En 2013, estaba en 6.9. Un experto en el tema asegura que podría continuar bajando si se toman los controles necesarios a partir de la madre.