Por Francis Aníbal
SAN PEDRO DE MACORIS.
Una familia de colombianos, quienes pertenecen a una denominación
cristiana, fue secuestrada por otros extranjeros quienes ahora guardan
prisión en la cárcel preventiva local.
La denuncia fue hecha
por los abogados de la familia, licenciados Sandy Santana Peguero, Maria
Santana Guerrero y Otilio Sanchez Reyes, quienes dijeron temer que los
acusados salgan en libertad.
Los juristas dijeron que la familia de
colombianos llegó al país en misión cristiana y pertenecen a la Iglesia
de la Cristianización en esta ciudad.
Explicaron que con
relación al secuestro guardan prisión desde hace unos 15 días, en la
cárcel preventiva local, Ulises Damihán Paz Sanclemente, de nacionalidad
colombiana e Israel Selvas Rodríguez, de nacionalidad mexicana, y están
prófugos otros extranjeros conocidos como Alejandro Agüero y Jonathan.
Explicaron que todos están acusados del secuestro del señor Yull Adrian
Gonzalez Romero, a quien secuestraron primero y luego a su esposa
Janiris Milena Vargas Medina, además de dos hijos menores de edad.
Los juristas añadieron que los secuestradores pedía un rescate de mas
de dos millones doscientos mil dólares, y que amenazaban a los
familiares en Colombia, a quienes tenían ubicados.
Dijeron que
los captores obligaban a González Romero a trabajar en trading o
inversiones en criptomonedas y bolsas de valores, desde un lugar donde
permanecían cautivos en Bávaro, Punta Cana, en la provincia La
Altagracia.
Añadieron que la esposa de éste y sus dos hijos menores permanecían secuestrados en otro lugar, por espacio de cuatro días.
Los abogados dijeron que sus clientes pudieron ser rescatados por las
autoridades, gracias a una denuncia interpuesta por un amigo, que se
enteró de la situación debido a que González Romero le pudo escribir via
la aplicación telefónica Telegram, ya que su WhatsApp estaba
intervenido por sus secuestradores.
Dijeron que en los pasillos
del Palacio de Justicia se rumora que éstos podrían ser puestos en
libertad, lo que crearía un mal precedente por lo que a las autoridades
competentes aplicar una sana justicia.
Los abogados se quejaron
de que los testimonios de Janiris Milena Vargas, la esposa secuestrada,
ni de los niños, han sido escuchados por las autoridades, ni se han
tomado en cuenta los videos que existen, de los acusadores merodeando el
edificio donde se alojaba la familia antes del secuestro, el que está
ubicado en la calle Enrique Rijo del sector de Miramar de aquí.
Definieron a los secuestrados como personas de bien, por lo que exigen una aplicación de justicia como manda la ley.
0 Comentarios