Los canadienses votaron este lunes en unas elecciones que podrían debilitar al primer ministro Justin Trudeau o premiar la gestión de la pandemia por parte de su gobierno.
Trudeau apostó por unas elecciones anticipadas para tratar de sacar provecho del hecho de que Canadá se encuentra ahora entre los países más vacunados del mundo contra el COVID-19. Pero la oposición ha sido implacable al acusarle de convocar a una votación anticipada innecesaria —dos años antes de la fecha límite— por ambición personal.
Las encuestas realizadas antes de las elecciones mostraban al Partido Liberal de Trudeau en una contienda muy cerrada con los conservadores. Los primeros resultados mostraban que los liberales de Trudeau se mantenían al frente en la zona del Atlántico canadiense, pero algunos avances de los conservadores en la región parecían presagiar una carrera reñida.
Los liberales lideraban en 23 de los 32 escaños en juego en las cuatro provincias de la costa atlántica, tres menos que en las elecciones de 2019. Los conservadores lideraban en nueve, más del doble de los cuatro que ganaron en 2019.
CREDITOS A DIARIO LIBRE
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