Una
reducción en las recaudaciones de impuestos internos y externos por
concepto del impuesto a la transferencia de bienes y servicios (ITBIS)
es la causa argumentada por la Comisión Permanente de Presupuesto del
Senado para justificar la modificación del presupuesto público del 2019.
En su informe, la Comisión estima esa reducción en un poco más de 15
mil millones de pesos.
Mientras que, en su carta al presidente
del Senado de fecha primero de octubre de 2019, el presidente Danilo
Medina justificó el proyecto de modificación presupuestaria por el
impacto de “forma desfavorable” que sobre el desempeño de algunas
actividades productivas en el país han tenido los cambios en el entorno
internacional y de su efecto a la baja en el crecimiento de la economía
mundial.
Más déficit fiscal
De
acuerdo a la carta del Mandatario, se espera que esos eventos “impacten
de forma desfavorable en el desempeño de algunas actividades
productivas en el país, afectando el crecimiento de nuestra economía y
las recaudaciones fiscales previstas en el Presupuesto General del
Estado”, correspondiente al 2019.
En la misma comunicación, el
presidente Danilo Medina informa al Senado que las modificaciones
presupuestarias solicitadas incrementará el déficit del Gobierno Central
a 2.2% del PIB, desde el 1.7% aprobado en el Presupuesto General del
Estado.
Un abismo de deudas
Entre los
“considerando” que es lo mismo que las justificaciones para la
modificación presupuestaria, en el anteproyecto de modificación se
detalla que durante el 2019 las empresas distribuidoras (Edenorte,
Edeeste y Edesur) debieron recurrir a financiamiento de corto plazo con
la banca comercial local por un monto de US$495 millones de dólares, “a
fin de cumplir con pagos a contratistas y proveedores originados en
fracturas recibidas en el año 2018”.
Esto es así, a pesar de a
septiembre de 2019, la Asociación Dominicana de la Industria Eléctrica
(ADIE) informa en su página web que el total de la deuda que la CDEEE y
las distribuidoras acumulan con sus representados suman más de 566
millones de dólares, monto del cual ya es deuda vencida un poco más de
478 millones de dólares, equivalente al 85% del total.
Otro
considerando del proyecto aprobado revela que, al cierre del 2018, el
monto de facturas por compra de energía realizadas por la CDEEE, Edesur,
Edenorte y Edeeste pendientes de pagos era de más de US$789.4 millones,
“del cual quedará pendiente al cierre del 2019 un remanente” de más de
611.7 millones de dólares”.
Además, destacan que adicionalmente,
durante el transcurso del 2019, “se han acumulado facturas por compra de
energía pendientes de pagos”, por parte de las distribuidoras por un
monto ascendente a más de RD$33 mil millones de pesos.