A más de tres meses del cierre del turismo dominicano por la pandemia
de COVID-19, las pequeñas y medianas empresas que se sustentan de la
actividad están en una situación financiera difícil que les dificultaría
retomar sus operaciones con normalidad.
Será a partir del
primero de julio cuando la actividad turística reinicie en el país,
según lo dispuesto por el Gobierno, pero en el caso de las empresas
transportistas de turistas su supervivencia dependerá de la velocidad
con la cual se recupere el flujo de visitantes extranjeros.
Tusides
Santana, presidente de la Asociación Dominicana de Transporte Turístico
(Adotratur), reconoció que, aunque todavía no se registra la quiebra de
empresas de ese sector, “yo sé que eso va a pasar, lamentablemente”.
CREDITOS A DIARIO LIBRE