Las autoridades de Wuhan, capital de la provincia china de Hubei y
epicentro del brote del nuevo coronavirus, endurecieron hoy la
cuarentena a la que está sometida la ciudad desde el pasado 23 de enero
con medidas como el cierre de todos los complejos residenciales.
El Gobierno de la ciudad publicó hoy en su página web nuevas
directrices para el control de la epidemia, en las que indica que todas
las urbanizaciones de la ciudad quedarán selladas a partir de hoy para
minimizar el flujo de personas.
Según el diario oficial Global Times, que muestra imágenes de
barreras improvisadas en los complejos donde no hay vallas, las personas
encerradas en sus comunidades seguirán pudiendo recibir pedidos de
comida y otros enseres a domicilio.
Las autoridades de la urbe, la séptima más poblada de China,
indicaron que todos los edificios donde haya casos confirmados o
sospechosos deberán ser sellados al exterior y gestionados “de forma
estricta”. Asimismo, se reclama a los ciudadanos que “apoyen
activamente” estas medidas y se les invita a “disuadir” a quienes
“interfieran y dificulten” su aplicación.
Otra de las iniciativas hechas públicas hoy por la ciudad es que
todos aquellos que tengan síntomas relacionados con el coronavirus,
aunque sean leves -por ejemplo, fiebre-, deberán procurar atención
médica en los centros de salud más cercanos y no ir a los de otros
distritos, para tratar de evitar la propagación del virus.
En caso de que deban ser ingresados y que el centro en cuestión no
cuente con camas suficientes, la clínica deberá encontrar un lugar en el
vecindario donde se pueda llevar a cabo el período de observación.
El Ejecutivo local decidió cerrar la urbe el pasado 23 de enero para
intentar evitar que el virus se expandiera, aunque ha recibido críticas
por no haber tomado esa decisión antes, ya que cinco millones de
personas habían salido de la ciudad en los días anteriores como parte
del éxodo anual por las vacaciones del Año Nuevo chino.
Tras el cierre, quedaron nueve millones de personas dentro de Wuhan,
ciudad en la que se cree que surgió el brote en un mercado donde se
vendían animales salvajes de forma ilegal. Hasta el momento, se han
registrado 18.454 casos y 748 muertes en Wuhan, cifras que representan
el 43 % y el 74 %, respectivamente, del total nacional.