A diciembre
del año pasado, 412,824 dominicanos dependían de un empleo en el sector
agropecuario como medio de sustentación. Por alguna razón, durante el
primer trimestre del presente año esa cantidad de trabajadores se redujo
en 20,139, lo que refleja una caída en tres meses de 4.9%, según las
estadísticas del Banco Central.
Pero lo que se avecinaba para el
sector al entrar más el 2020, se sabe ahora que es una gran recesión que
no cesa y que arruinó a muchas pequeñas empresas agropecuarias con la
misma velocidad con que se dañada su producción altamente perecedera, al
ver caer sus precios de sustentación, en un mercado comprimido por la
pandemia del COVID-19, y receptor de importaciones.
En esta
entrevista al economista Hecmilio Galván, vicepresidente ejecutivo de la
Confederación Nacional de Productores Agropecuarios (Confenagro), se
explica cómo los productores del campo se descapitalizan mientras en una
situación sin salida, caía la demanda, y luego los precios, y se
mantenían las importaciones contra las que competían.
P. ¿Con un nuevo Gobierno, cuales son las expectativas de los productores agropecuario?
R.
Estamos a las expectativas sobre un Gobierno que se acaba de declarar
electo, y próximamente tomará posesión. Y hemos definido lo que son los
principales retos. Y nosotros, en el sector agropecuario, también nos
hemos reunido.
P. La agropecuaria ha sufrido mucho con la
pandemia, y de la situación dependen los retos. Han caído los precios,
aunque han salvado la alimentación del país. ¿Cómo visualizas la
situación actual de la agropecuaria?
R. Hay una descapitalización
general en el sector agropecuario. Principalmente los sectores que han
sido afectados por la pandemia. Casi todos los productores están
descapitalizados y afectados. Por ejemplo, los productores de leche, la
mayoría bajó los precios. Los plataneros bajaron sus precios muy
significativamente.
Además, los productores de vegetales
perdieron prácticamente su producción, en gran escala. Para los
productores de cacao también bajaron los precios internacionales. Los
productores de arroz no fueron tan afectados, pero también están
sufriendo por la pandemia. Y obviamente que los productores de pollo
tuvieron una situación difícil.
Por la descapitalización, hay
dificultades para reiniciar la producción, sobre todo para la resiembra
ahora sobre todo para esta fecha de fin de año, como en los casos de las
habichuelas, segunda cosecha de arroz. Se comienza a cosechar
nuevamente el cacao.
Obviamente eso puede reducir la producción agropecuaria.
P. ¿Hubo apoyo del Gobierno?
R.
El apoyo del Gobierno fue prácticamente nulo, aunque hubo algunas
compras específicas en algunos sectores. No satisfizo obviamente la
situación, y sobre todo que también llegó tarde.
P. Las
importaciones de productos agropecuarios han hecho mucho daño al campo
dominicano. Y hay muchas denuncias sobre prácticas no muy transparentes
en las subastas para las importaciones agropecuarias. ¿Eso continuó
sucediendo bajo la pandemia?
R. Sí, lamentablemente. Es bueno que
tú sepas que nosotros hicimos una propuesta que circuló bastante, e
incluso Diario Libre la publicó. Fue una propuesta de puntos que
nosotros entendíamos que tenían que tomarse para evitar el colapso del
sector agropecuario durante la pandemia y obviamente garantizar una
soberanía y una seguridad alimentaria para la población.
Pero esa
propuesta incluía, en uno de los puntos principales, la prohibición
temporal de algunas importaciones, pero lamentablemente ninguna
importación se paró, y al contrario, hubo facilidades para las
importaciones, incluso peligrando lo que es la sanidad.
El
ministro de Agricultura redujo las regulaciones y sobre todo, liberó de
procedimiento de inspección a los contenedores ya existente, para
facilitar....
P. Permítame ver si entiendo, ¿eliminó las barreras fitosanitarias?
R.
Prácticamente, la inspección. Exacto. No toda la barrera, sobre la
inspección, me refiero a la física. Solamente se concentró en la
inspección documental. Lo único que quedó.
Eliminó parte de la
barrera fitosanitaria, y eso obviamente genera un peligro para un país
que está seriamente amenazado por enfermedades que están muy cerca.
Incluso hay enfermedades en Haití, que gracias a Dios no han llegada
aquí, pero que nos amenazan severamente.
P. ¿Y eran productos que se producen localmente?
R.
Productos alimentarios, fueron para todos, porque fue una carta abierta
para liberar de procedimientos de inspección a los furgones ya llegados
a puertos, y eso, obviamente facilitando las importaciones. Y los
grandes emporios comerciales mantuvieron todas sus importaciones y todos
sus canales de distribución.
Nosotros como país tenemos un
problema con las importaciones porque, aunque no somos contrarios al
comercio internacional, sí tenemos que poner regulaciones, y sobre todo
proteger en parte la producción nacional, que es de donde depende el
empleo.
CRÉDITOS A DIARIO LIBRE