El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró este jueves
con una caída del 8.2 %, hasta los 36.34 dólares el barril, motivado por
el miedo en el mercado a una segunda oleada de casos de COVID-19 que
paralice de nuevo la economía y golpee la demanda de combustible.
Al
final de las operaciones en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex)
los contratos de futuros del WTI para entrega en julio restaron 3.26
dólares respecto a la sesión previa del miércoles, cuando el Texas
avanzó un 1.7 %.
Los precios del petróleo de referencia en
Estados Unidos bajaron también por la crecida en los inventarios de
crudo estadounidenses, no prevista por los analistas y que podría ser un
indicador de que el ansiado repunte en la demanda no se ha producido
con la fuerza que se esperaba.
CREDITOS A DIARIO LIBRE