El expresidente Leonel Fernández fue a la clínica donde está ingresado el diputado Henry Merán
tras ser afectado por los gases lacrimógenos que lanzaron agentes en el
Congreso Nacional para dispersar a personas que se manifestaban contra
una reforma a la Constitución.
Para el presidente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), este incidente es un acto de represión injustificado.
“Rechazamos la coacción de que fueron objeto los diputados y
ciudadanos que protestaron para que sea respetada la Constitución, para
que no sea reformada para beneficios personales, lo que consideramos un
acto cívico que tiene que ser respetado”.
Además, el exmandatario recordó a su salida del centro de salud, que
el derecho a la protesta pacífica es un derecho fundamental que tienen
los ciudadanos y que fue vulnerado en esta ocasión, ya que los
manifestantes tenían un permiso del ayuntamiento para instalar una
carpa, lo que fue desconocido e ignorado por los oficiales al mando de
los agentes.
Asimismo, Leonel mediante su cuenta de Twitter dijo que fue un acto
inaceptable y violento que cercena la institucionalidad y los principios
democráticos del país.