El Ministerio de Justicia de Italia ordenó el miércoles una
investigación preliminar en torno al fallo de una corte de apelaciones
que desestimó un veredicto en un caso de violación, en parte porque el
jurado argumentó que la mujer era demasiado fea como para ser una
víctima creíble.
El fallo generó indignación e incluso una protesta el lunes afuera de la corte en Ancona, donde los manifestantes gritaron “¡Vergüenza!” y portaban carteles con mensajes que decían “indignación”.
La sentencia de apelación fue dictada en 2017 por un jurado
conformado en su totalidad por mujeres, pero la razón del fallo se
conoció apenas el 5 de marzo, cuando una importante corte lo anuló y
ordenó un nuevo juicio. La Corte de Revocación de Sentencias dijo el
miércoles que el mes entrante emitirá sus propias razones para ordenar
un nuevo juicio.
En un inicio, dos hombres peruanos fueron hallados culpables por la
violación en 2015 de una mujer peruana en Ancona, pero la corte italiana
de apelaciones anuló el veredicto y los absolvió por considerar que
ella no era una testigo confiable. En una parte del fallo, el tribunal
indicó que los sospechosos no la consideraban atractiva e incluso les
parecía “masculina”, por lo que no podía ser una víctima creíble de
violación.
Cinzia Molinaro, abogada de la mujer, dijo que el caso presentado
ante la Corte de Revocación de Sentencias cuestionó una serie de
problemas en el proceso para anular el veredicto, pero la defensora
también citó la referencia “absolutamente inaceptable” que hizo el
tribunal sobre la apariencia física de la víctima.
La sentencia de apelación citó a uno de los sospechosos diciendo que
consideraba fea a la mujer y en su teléfono la tenía registrada como
“Vikinga”.
Molinaro indicó que la mujer, quien desde entonces regresó a Perú,
sufrió tal trauma durante la violación que requirió puntadas en los
genitales.
El Ministerio de Justicia dijo que llevaría a cabo las
“investigaciones preliminares necesarias” sobre la apelación del fallo.
Molinaro dijo que el ministerio puede enviar investigadores a una corte
para revisar si hubo omisiones en la sentencia, incluso aunque el caso
se siga apelando.
El caso es el segundo en generar polémica en semanas recientes en
Italia, donde los casos de violencia sexual y asesinato de mujeres por
lo regular son noticia de primera plana.
A inicios de este mes hubo protestas después de que una corte de
apelaciones en Boloña casi reduce a la mitad la sentencia a un hombre
que reconoció haber matado a su pareja. El tribunal citó como una de las
razones para reducir la sentencia la “tormenta emocional” de celos que
padecía el asesino. Los críticos dijeron que reducir la pena era
básicamente aprobar la práctica de los “asesinatos por honor”.