De Último Minuto

6/recent/ticker-posts

Ad Code

Los 90 minutos que más cuentan


El cardiólogo dominicano César Herrera vino hace cinco meses al país a ejercer como director del centro cardiovascular de Cedimat tras una significativa carrera como director del Departamento de Cardiología del Hospital Illinois Masonic de Chicago en Estados Unidos.
Su intención es implementar la Red Dominicana del Infarto (REDI) junto a otros especialistas y con el aval del Ministerio de Salud Pública. ¿Sus motivos? La necesidad de un cambio en las políticas públicas con relación al tratamiento y prevención de las enfermedades cardiovasculares: “Las enfermedades del corazón son la causa número uno de muerte en todo el mundo y nuestro país no escapa de eso”, enfatiza con gravedad.
Una de las primeras iniciativas con relación a esta red fue el Seminario Internacional del Infarto al Miocardio, una serie de conferencias destinadas a capacitar al personal de emergencia de los hospitales y el 911 (ya que son los primeros que se enfrentan a este cuadro clínico) y promover el diálogo entre los especialistas del área con relación a esta cardiopatía que ha alcanzado características epidémicas alrededor del mundo.
Cuestión de tiempo. “El infarto al miocardio es una condición en la que las arterias o una de las arterias se obstruye de forma brusca. El corazón es una bomba hecha de músculos y para poder funcionar necesita oxígeno, sangre oxigenada. La sangre llega el corazón por unos tubitos pequeños que se llaman arterias coronarias -explica Herrera-; esas arterias coronarias se van enfermando con el paso del tiempo por diversos factores como mala herencia genética, malos hábitos, el cigarrillo, el colesterol, por la diabetes o la obesidad. Comienza a acumularse grasa y un día, de pronto, ocurre una obstrucción, brusca y aguda, a veces sin advertencia, que le produce al paciente un infarto”.
Infarto significa que el músculo del corazón empieza a morirse porque no le está llegando sangre al corazón. “¿Qué tiene el infarto de especial? -continúa-, primero, que es una de las enfermedades más graves del corazón, porque es la que con más frecuencia mata y nos da solo una ventana de tiempo limitada para actuar, que es de 90 minutos.
Si en 90 minutos tú no logras destapar esa arteria de la manera que sea, sea con un catéter, haciendo un “stent”, o con un medicamento inyectado, se muere el músculo, se muere el paciente”, concluye.
Factores de riesgo. Aun siendo las peores de todas las enfermedades crónicas, las enfermedades cardíacas se pueden prevenir, “pero no lo hacemos”, argumenta el especialista. Algunos de los factores que destaca son la dieta, la inactividad física, el sobrepeso, la obesidad, el tabaquismo, el estrés y la falta de acceso a la salud.
“La comida dominicana es muy sabrosa, pero desafortunadamente hay demasiado uso de la fritura. Creo que la dieta es un componente que hay que modificar. Además, no tenemos una cultura de actividad física. El dominicano tiene que aprender a sacar un tiempito para quemar las grasas y mantener las arterias relajada”.
A esto añade los niveles de ruido en el país, que generan estrés y consecuencias negativas para la salud.
Prevenir y educar. Una de las medidas más importantes para combatir el avance de las enfermedades cardiovasculares es, por supuesto, educar a la población: “Me llegó un paciente hace dos días con un infarto que le pasó en la noche. Le dio un dolor y se tomó un vaso de agua, creyendo que era dolor de estómago”, relata Herrera.
“Los síntomas cardíacos de preocupación son cualquier tipo de sensación que se dé entre la mandíbula y la boca del estómago, en el epigastrio… Todo lo que una persona sienta en esta área que se irradie sobre todo al lado izquierdo o al cuello y que le pueda producir dolor, ardor, dificultad para respirar, apretamiento o sudoración, y sobre todo si ocurre en la realización de algún esfuerzo físico, hasta que se demuestre lo contrario, es un síntoma coronario. Esa persona debe ir a un cardiólogo y punto”, recomendó el especialista.
Acerca de REDI, Herrera es optimista, aunque entiende que la sociedad se ha rezagado en la lucha contra las enfermedades del corazón: “Si las enfermedades van como en una carrera… hay una disparidad entre ellas y la velocidad en que van las políticas públicas y la cobertura”, sentencia.
Opina que el éxito de este proyecto “no ocurrirá de la noche a la mañana, pero se puede lograr”.

Publicar un comentario

0 Comentarios

Ad Code