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Preocupa alto nivel de contaminación que presenta el río Masacre


 

Gran parte de la población que reside en la franja norte de la frontera domínico-haitiana está expuesta a enfermedades de origen hídrico, producto de la contaminación que impera en el río Masacre, a su paso por los municipios de Dajabón y Juana Méndez.

Y es que muchos de los desechos generados en el mercado que desarrollan comerciantes dominicanos y haitianos en esa demarcación son vertidos en ese curso de agua, frontera natural entre República Dominicana y Haití.

A la orilla del río se pueden observar vasos, platos, botellas y otros desechos, en su mayoría plásticos.

Esa situación es atribuida a la falta de conciencia ciudadana y el incumplimiento de las normas medioambientales.

Fernando Capellán, presidente de la empresa de zonas francas Grupo M-Codevi, una de las principales industrias instaladas en la frontera por Dajabón, externó la necesidad de evitar la cantidad de plásticos y otros desperdicios que genera en el intercambio comercial de Dajabón.

"Hay que hacer un trabajo en el mercado. Es de ahí dónde sale la contaminación", declaró el también presidente de la Asociación para el Desarrollo (Apedi).

El ambientalista Gonel Franco entiende que el río Masacre debe ser declarado en estado de emergencia, tanto por las autoridades dominicanas como haitianas, ya que ese curso de agua atraviesa por suelo de ambos países.

Además, sugiere que en la búsqueda de soluciones sea organizado un foro para buscar soluciones a corto, mediano y largo plazo.

"De seguir así la degradación de nuestro río podríamos quedar sin la principal fuente de agua que tenemos", subrayó Franco.

El director provincial del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Edward Pérez, reconoció la gravedad que constituye la cantidad de desperdicios que genera en el mercado y que va directamente al río Masacre.

Dijo que para revertir esa situación están trabajando con el viceministerio de Gestión Ambiental y la Alcaldía de Dajabón en el manejo de los desechos sólidos.

"Ahora mismo estamos trabajando en el proceso de capacitación de los empleados de los ayuntamientos y de la población", señaló el funcionario.

Informó también que, para recuperar el caudal del Masacre, están coordinando un plan de reforestación de las cuencas alta, media y baja del afluente.

El río Masacre le da vida a la República Dominicana y a la República de Haití. De ese afluente depende el desarrollo agrícola de los municipios de Juana Méndez, en el vecino país, y Dajabón, en el territorio local.

Además, de esas aguas se alimenta el acueducto que suple del mineral a los residentes de Dajabón.

 

 

 

CREDITOS  A DIARIO LIBRE 

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