“Hola, aquí Nightline, te escucho”. Los teléfonos de esta línea gratuita de atención para estudiantes en París no paran de sonar desde marzo. Depresión, ansiedad, problemas para conciliar el sueño... La pandemia ha dejado una enorme huella psicológica en los jóvenes.
Todas las noches, entre las 21H30 y las 02H00, esta asociación gestionada por estudiantes recibe decenas de llamadas de otros con síntomas de ansiedad o cuadros depresivos debido al confinamiento.
“¿Cuándo comenzaste a sentirte así?”, pregunta uno de los 60 voluntarios de Nightline que, después de haber seguido una formación, se turnan en los teléfonos. Del otro lado de la línea, jóvenes de entre 18 a 24 años buscan un oído amigo para desahogarse.
CREDITOS A DIARIO LIBRE
0 Comentarios