Entre
Santo Domingo y Hondo Valle la distancia no solo se mide en kilómetros,
también se evidencia en la conectividad al mundo de la tecnología. El
pequeño municipio de la sureña provincia Elías Piña, ubicado a 264
kilómetros de la capital dominicana, carece de cuentas de internet fijo,
la conexión de banda ancha que los expertos consideran más idónea para
lograr una educación efectiva desde el entorno virtual.
En
el municipio, que colinda con la comunidad Belladere, del vecino Haití,
cuenta con 13 centros educativos. Uno de ellos es la escuela pública
Aniceto Martínez. Allí no hay computadoras y tampoco serían útiles. En
el centro, que para el Año Escolar 2019-2020 tenía 118 estudiantes, la
tecnología se puede considerar una ilusión. No hay líneas de teléfonos,
ni señal de internet. Ni siquiera servicio de energía eléctrica.
Milky Medina Santana, director del centro, afirma que para llamar con
un teléfono móvil hay que salir de la comunidad que lleva el mismo
nombre del centro educativo hasta el municipio Hondo Valle. La escuela
fue reconstruida en 2016 y acoge a estudiantes de Inicial hasta Sexto
Grado con jornada extendida, en una comunidad de unas 30 familias que,
aunque inquietas por el inicio de la docencia, temen al contagio del
coronavirus que provoca la COVID-19.
Todavía no se ha confirmado ningún caso de la enfermedad en el lugar,
pero los residentes prefieren la modalidad radiofónica para la
docencia. República Dominicana ya tiene experiencia en ese campo con las
escuelas de Radio Santa María.