Más de 135,000 tiendas tuvieron que cerrar definitivamente sus
puertas al público en Brasil durante el segundo trimestre del año por la
crisis de la pandemia del coronavirus, el mayor número registrado desde
2016, cuando el país sufrió una de las más graves recesiones económicas
de su historia.
De acuerdo con un estudio realizado por la
Confederación Nacional de Comercio de Bienes, Servicios y Turismo (CNC),
el número de almacenes que pusieron fin a su actividad en el gigante
suramericano equivale al 10 % del total de establecimientos comerciales
registrados antes de que el COVID-19 llegara a Brasil.
En total
fueron 135,200 tiendas clausuradas, un 22 % más que las que tuvieron que
cerrar sus puertas en 2016 cuando la economía se contrajo un 3.5 % por
segundo año consecutivo, tras la crisis económica que el país sufrió
desde 2015 y de la que apenas comenzaba a recuperarse desde 2017 pero
con un crecimiento muy lento (1.3 % en 2017, 1.3 % en 2018 y 1.1 % en
2019).