Los dirigentes europeos redoblaron este domingo sus esfuerzos para
levantar las reservas de los países llamados “frugales”, así como de
Hungría y Polonia, sobre su plan para superar los estragos del
coronavirus, en una tercera jornada de discusiones sin solución a la
vista.
“Hay mucha voluntad (...) pero es posible que no se
obtenga ningún resultado hoy” ayer advirtió la canciller alemana, Angela
Merkel, a su llegada a la sede del Consejo Europeo en Bruselas, donde
calificó la jornada de “decisiva”.
El presidente francés,
Emmanuel Macron, un poco más optimista, consideró “todavía posible”
llegar a un acuerdo, pero aseguró que no se hará “a costa de la ambición
europea”. “Nuestros países lo necesitan y la unidad de Europa lo
necesita”, señaló.
CREDITOS A DIARIO LIBRE