El 7 de mayo la Organización Mundial del Turismo (OMT) divulgó unas
estimaciones sobre el impacto de la pandemia del COVID-19 sobre el
sector turístico mundial. En un comunicado informó que el turismo
internacional se había contraído en un 22% durante el primer trimestre
del año, y que en lo que restaba del mismo esa contracción podría llegar
a ser de 60% a 80%.
La contracción a marzo significó 67 millones
de turistas menos, lo que representó 80,000 millones de dólares en
exportaciones perdidas.
“El mundo afronta una crisis sanitaria y
económica sin precedentes. El turismo ha recibido un duro golpe, y son
millones los puestos de trabajo que se encuentran en peligro en uno de
los sectores de la economía que más mano de obra emplea”, declaró el
secretario general de la OMT, Zurab Pololikashvili.