El Kevzara, un medicamento contra la artritis estudiado en las
últimas semanas como posible tratamiento contra el nuevo coronavirus, tuvo resultados decepcionantes en ensayos clínicos, declararon este lunes sus fabricantes.
El
medicamento de la compañía estadounidense Regeneron y la francesa
Sanofi no ataca directamente al nuevo coronavirus, sino que inhibe una
respuesta inmunitaria anormal llamada "tormenta de citocinas", que
provoca una inflamación en los pulmones de los pacientes más enfermos,
obligados a luchar contra la enfermedad con un respirador artificial.
Un primer pequeño estudio de China parecía prometedor; pero el Kevzara no mostró ninguna ventaja respecto a un placebo en un estudio estadounidense de mayor tamaño con 276 pacientes afectados por una forma "grave" de enfermedad, es decir, personas que necesitaban oxígeno pero no un respirador.