Tras una solicitud del Gobierno de la República
Dominicana, el Banco Mundial (BM) informó que otorgó US$150 millones
para respaldar los esfuerzos del país en la implementación de medidas de
emergencia para contener la propagación del COVID-19 (coronavirus) y
gestionar el impacto de la pandemia.
El organismo internacional recordó que el 19 de marzo de 2020, la
República Dominicana declaró un estado de emergencia que estará vigente
durante 25 días e impuso el toque de queda en todo el territorio
nacional —en principio hasta el 3 de abril— para facilitar la puesta en
marcha de medidas extraordinarias destinadas a combatir la propagación
del COVID-19.
“En
los últimos años, la República Dominicana ha logrado avances en
términos de fortalecer su capacidad de respuesta ante emergencias,
incluidos eventos relacionados con la salud pública”, dijo Alessandro
Legrottaglie, representante del BM para la República Dominicana.
A través de un comunicado, el BM explicó que los fondos provienen de
una línea de crédito contingente del Banco Mundial, mejor conocida como
Opción de Desembolso Diferido ante Catástrofes (Cat-DDO), vigente desde
2018.
La Cat-DDO fue la primera de su tipo en la región del Caribe y respaldó una serie de reformas públicas tendientes a mejorar el marco institucional y normativo para una mayor resiliencia ante desastres naturales.
Estas reformas incluyeron medidas para fortalecer al sector de la salud, de acuerdo con las normativas internacionales estipuladas por la Organización Panamericana de la Salud y la Organización Mundial de la Salud.
La Cat-DDO fue la primera de su tipo en la región del Caribe y respaldó una serie de reformas públicas tendientes a mejorar el marco institucional y normativo para una mayor resiliencia ante desastres naturales.
Estas reformas incluyeron medidas para fortalecer al sector de la salud, de acuerdo con las normativas internacionales estipuladas por la Organización Panamericana de la Salud y la Organización Mundial de la Salud.
La Cat-DDO proporciona liquidez inmediata para apoyar los esfuerzos
de recuperación del país luego de un desastre natural o una emergencia
de salud pública.