Francia
quiere que el G20 decida "una ayuda masiva e inmediata" para los países
en desarrollo, en particular los africanos, que se van a ver
confrontados a la crisis sanitaria del coronavirus y al impacto
económico que ya se está dejando sentir.
El ministro de Economía y
Finanzas, Bruno Le Maire, explicó a la prensa que va a lanzar "un
llamamiento a la solidaridad para los Estados más frágiles" durante la
teleconferencia con sus homólogos del G20 este martes, con un aumento de
las líneas de crédito y una moratoria en el reembolso de la deuda.
Por
una parte, se trataría de incrementar a 500,000 millones de dólares los
llamados derechos especiales de giro (DTS) del Fondo Monetario
Internacional (FMI) y la movilización de una línea de crédito rápidoPor
otra, una moratoria para el pago de la deuda que "podría ser una primera
etapa para aliviar a esos estados", según Le Maire.
El
ministro francés subrayó su "gran preocupación" por la situación de los
países en desarrollo, y en particular de los africanos.La razón es que
antes incluso de verse afectados de lleno por la epidemia de la
COVID-19, están viendo cómo se reducen sus exportaciones de materias
primas y, sobre todo, por el desplome del precio del petróleo, que se
sitúa por debajo de los 25 dólares el barril.
Le Maire recordó que para un país como Chad, el petróleo representa el 60 % de sus exportaciones.
El
ministro francés justificó el dispositivo de ayuda que propone al G20
para que "los Estados más frágiles del planeta no sean las primeras
víctimas de la crisis del coronavirus".