Los países participantes en la cumbre climática de Naciones Unidas en
Madrid seguían estancados este sábado en las conclusiones del encuentro
sobre la lucha contra el cambio climático, que se prolongó más allá de su fecha límite oficial y no tenía visos de finalizar.
La
ministra de Medio Ambiente de Chile, Carolina Schmidt, que preside la
cumbre, instó a funcionarios de los casi 200 países asistentes a
reconocer el “equilibrio general” de los últimos borradores de acuerdo
elaborados durante la noche. “Debemos mostrarle al mundo que cumplimos”,
afirmó mientras los funcionarios se preparaban para seguir adelante con
las negociaciones.
Pero observadores y grupos ambientalistas expresaron su indignación
por las propuestas realizadas, señalando que se corre el riesgo de
retroceder o mantenerse en los compromisos contemplados en el Acuerdo de
París de 2015. “He asistido a estas negociaciones climáticas desde que
comenzaron en 1991, pero nunca había visto la desconexión casi total que
hemos visto aquí (…) en Madrid entre lo que requiere la ciencia y lo
que los pueblos del mundo demandan, y lo que los negociadores climáticos
dan”, manifestó Alden Meyer, especialista en política climática de la
Unión de Científicos Preocupados.
Según Meyer, los borradores que se barajan no reflejan las
advertencias urgentes de los científicos acerca de la necesidad de
reducir de forma drástica, y pronto, las emisiones de gases con efecto
invernadero para mantener el calentamiento global en 1,5 grados Celsius
(2,7 Fahrenheit) para final de siglo.
Según la mayoría de los cálculos, las temperaturas han subido ya un
grado Celsius desde tiempos preindustriales y las medidas tomadas hasta
el momento arrojarían un incremento de entre 3 y 4 grados Celsius para
2100, algo que tendría consecuencias posiblemente devastadoras,
especialmente para los países en desarrollo vulnerables.
“El planeta está en llamas y cuando más tardemos en actuar más difícil será llegar a nuestra ventana de escape”, apuntó Meyer.
La creciente preocupación por el cambio climático se reflejó en las
protestas masivas registradas en todo el mundo en el último año, a
menudo encabezadas por jóvenes activistas preocupados por el futuro que
tendrán ellos y sus hijos en un planeta cada vez más caliente. El
Departamento de Salud y Ciencia de The Associated Press recibe apoyo del
Departamento de Educación Científica del Instituto Médico Howard
Hughes.