El exdirector del Instituto Nacional de Aguas
Potables (INAPA), Roberto Rodríguez, implicado en el caso de soborno
Odebrecht, afirmó ayer que han querido castrar la buena imagen que ha
construido a través de su dilatada vida política y convertirlo en lo
que ha evitado caer toda su vida: “un político corrupto y cuestionado”.
Se quejó de que ni por delicadeza el ministerio público le ha pedido disculpas por haberle atribuido el depósito de 100 millones de pesos dos días sucesivos del 2016, que, precisó, después se convirtieron en un millón. Pidió al magistrado Francisco Ortega que “lea las pruebas, y nada más”.
“Aborrezco a los corruptos y ladrones, nunca nadie me ha dado nada a cambio de; Me pregunto por qué estoy aquí”, dijo ante el juez de la instrucción especial Francisco Ortega Polanco, que conoce el juicio preliminar a los siete implicados en los sobornos que admitió pagar la constructora brasileña Odebrecht para conseguir contratos de obras millonarias. Aseguró que los bienes obtenidos han sido el fruto del esfuerzo, el sacrificio y las limitaciones.
Sostuvo que lleva casi dos años escuchando las fábulas sin sentido del ministerio público, que han convertido los días en una eternidad.
La defensa legal del implicado en el caso Odebrecht solicitó declarar un no ha lugar de las acusaciones contra Rodríguez, alegando vulneración del debido proceso, tutela judicial efectiva y derecho de defensa por haberse realizado una investigación clandestina.
En caso de no acoger esa conclusión, pidió declarar inadmisible el requerimiento conclusivo de acusación presentada por el ministerio público, por haber incurrido en una falta de formulación precisa de cargos, y en consecuencia, que se declare la extinción penal.
El exdirector de INAPA está acusado de cohecho, prevaricación, enriquecimiento ilícito, falsedad en declaración jurada y lavado de activos, hechos vinculados a la construcción del acueducto de la Línea Noroeste.
El juez recesó la audiencia para el primero de abril, para continuar con la defensa del empresario Ángel Rondón y Jesús Vásquez (Chu).
Se quejó de que ni por delicadeza el ministerio público le ha pedido disculpas por haberle atribuido el depósito de 100 millones de pesos dos días sucesivos del 2016, que, precisó, después se convirtieron en un millón. Pidió al magistrado Francisco Ortega que “lea las pruebas, y nada más”.
“Aborrezco a los corruptos y ladrones, nunca nadie me ha dado nada a cambio de; Me pregunto por qué estoy aquí”, dijo ante el juez de la instrucción especial Francisco Ortega Polanco, que conoce el juicio preliminar a los siete implicados en los sobornos que admitió pagar la constructora brasileña Odebrecht para conseguir contratos de obras millonarias. Aseguró que los bienes obtenidos han sido el fruto del esfuerzo, el sacrificio y las limitaciones.
Sostuvo que lleva casi dos años escuchando las fábulas sin sentido del ministerio público, que han convertido los días en una eternidad.
La defensa legal del implicado en el caso Odebrecht solicitó declarar un no ha lugar de las acusaciones contra Rodríguez, alegando vulneración del debido proceso, tutela judicial efectiva y derecho de defensa por haberse realizado una investigación clandestina.
En caso de no acoger esa conclusión, pidió declarar inadmisible el requerimiento conclusivo de acusación presentada por el ministerio público, por haber incurrido en una falta de formulación precisa de cargos, y en consecuencia, que se declare la extinción penal.
El exdirector de INAPA está acusado de cohecho, prevaricación, enriquecimiento ilícito, falsedad en declaración jurada y lavado de activos, hechos vinculados a la construcción del acueducto de la Línea Noroeste.
El juez recesó la audiencia para el primero de abril, para continuar con la defensa del empresario Ángel Rondón y Jesús Vásquez (Chu).
