España se ofreció este martes a Venezuela para intentar resolver los
problemas de la red eléctrica que han causado un corte de luz en buena
parte del país, y que aún no han sido solventados.
En declaraciones a la cadena radiofónica española SER, el ministro de
Asuntos Exteriores, Josep Borrell, expresó su preocupación por la caída
de la red eléctrica.
"España estaría dispuesta -aseguró- a ver si podemos aportar ayuda para resolver este gravísimo problema".
Borrell explicó que este lunes se puso en contacto con representantes
de la oposición venezolana y les animó a "hacer una llamada a la ayuda
internacional a ver cómo se puede ayudar a estabilizar el sistema
eléctrico".
Según el ministro, resulta obvio que se debe "a un problema de fondo
de la propia red", ya que el sistema eléctrico venezolano "está muy
deteriorado por falta de mantenimiento y tiene averías sistémicas".
"Ahora es el sistema de luz, pero pronto puede ser el sistema de
agua, es un momento complicado y se puede provocar una situación
extremadamente grave", alertó.
El ministro también reveló conversaciones entre España y Estados
Unidos sobre la situación de Venezuela y la posibilidad de que, llegado
el caso, altos cargos del gobierno de Nicolás Maduro que decidieran
abandonar el país acabaran siendo acogidos en terceros, incluido España.
"El planteamiento no se concretó en nada", aseguró Borrell, quien
habló con el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, y con el
consejero de Seguridad Nacional, John Bolton.
Si llegara a precisarse dicha propuesta, dijo Borrell, "la
estudiaríamos, pero habría que bajar de las musas al teatro y saber de
qué, quién, cómo y cuándo estamos hablando".
Al ser preguntado por la decisión del presidente de Estados Unidos,
Donald Trump, de retirar a todo el personal de la Embajada
estadounidense en Caracas, Borrell lo vinculó a estos problemas de
suministros y señaló que "no afectará solo al personal de la Embajada de
Estados Unidos sino a todos los ciudadanos"