NACIONAL
El Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional conoció ayer la
primera audiencia del juicio de fondo contra Víctor Alexander Portorreal
Mendoza, alias Chamán Chacra, acusado de asesinar a su expareja y a sus
tres hijastros menores de edad.
Tras escuchar la acusación del Ministerio Público y las declaraciones de
nueve testigos y dos peritos, el tribunal que preside la magistrada
Gisselle Méndez continuará la audiencia hoy en la mañana con la
presentación de los testimonios faltantes.
La audiencia de ayer inició con el relato fáctico de la Fiscalía, en el
cual se detalló cómo el imputado violó a sus dos hijastras, de 6 y 10
años, y luego procedió a terminar con la vida de su pareja Reyna Isabel
Encarnación por esta haberle reclamado por dicho acto de incesto. Más
tarde, Portorreal ultimó a sus dos hijastras, y el día después a su
hijastro de 9 años, en una serie de hechos ocurridos entre el 4 y el 9
de febrero del año 2018.
Frialdad ante el dolor ajeno. Los padres de los fallecidos, quienes
conforman la parte querellante, se vieron en la necesidad de abandonar
la sala del tribunal con los ojos llenos de lágrimas, puesto que no
soportaron el profundo dolor que les causó escuchar tal narración.
Una vez reincorporados los parientes, sus abogados explicaron al
tribunal que ellos no desean ninguna indemnización económica y que lo
único que quieren es que el acusado cumpla la pena máxima de 30 años de
prisión.
“Yo no quiero que él muera. Tampoco quiero que lo manden a una cárcel
donde a él le den muerte. Yo lo que quiero es que cumpla por lo que
hizo”, aseguró Daniel Boden, padre biológico de los infantes fenecidos.
De su lado, el imputado mantuvo una actitud de completa frialdad frente a
todo lo que acontecía, limitándose en una ocasión a decir que “prefiere
declarar más adelante”, tras ser cuestionado por la magistrada Méndez
sobre si quería decir algo en su defensa.
La madre de Isabel Encarnación, Brígida Morales, dijo sobre esta
actitud: “él se ve frío, pero él es muy calculador porque nos engañó a
todos en la familia”.
Persona “tranquila”. Todos los testigos que dicen conocer a Portorreal
Mendoza desde hace varios años, mucho antes de cometer el cuádruple
asesinato que hoy se le imputa, afirmaron que él siempre fue una persona
“tranquila” y que “trataba bien a su pareja e hijos”.
Al igual que en anteriores ocasiones, no había nadie en la sala que
apoyara a Portorreal Mendoza, a excepción de los dos defensores públicos
que lo representan.
Aún pendientes
A la Fiscalía del Distrito Nacional aún le queda pendiente por presentar
las pruebas documentales con las que pretende demostrar la culpabilidad
del imputado.
Entre los presupuestos depositados destacan las cuatro actas de
levantamiento de los cadáveres, las dos actas de inspección de la escena
del crimen y las actas de nacimiento de los tres niños.
Mientras que las pruebas materiales que faltan por mostrar son dos cuchillos y dos celulares.
En cuanto a las pruebas periciales deben presentarse los cuatro informe
de autopsia judicial, el certificado de análisis forense y el informe
sobre el perfil de Facebook de Reyna Isabel Encarnación.
FUENTE: HOY
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