INTERNACIONAL
ROMA- El papa Francisco confesó hoy que ha pensado en el momento que
como todo obispo deba “despedirse” de sus fieles, durante su homilía en
la misa matutina que ofrece en su residencia, la Casa Santa Marta del
Vaticano.
Lo hizo al abordar la despedida del apóstol Pablo de
los ancianos para ir a Jerusalén: “Cuando yo leo esto pienso en mi
porque soy obispo y debo despedirme”, según difundió el canal de
información del Vaticano.
“Pido al Señor la gracia de poder
despedirme así. Y en el examen de conciencia no saldré vencedor como
Pablo (...) Pero el Señor es bueno, es misericordioso”, reconoció Jorge
Bergoglio.
El papa argentino dijo también que pensaba “en los
obispos, en todos los obispos. Que el Señor nos dé a todos nosotros la
gracia de poder despedirnos así, con este espíritu, con esta fuerza, con
este amor a Jesucristo, con esta confianza en el Espíritu Santo”.
A ellos se dirigió a los obispos para recordarles que su deber es “proteger a la grey y no trepar en una carrera eclesiástica”.
El
pontífice argentino consideró en una entrevista en 2015 que tenía “la
sensación” de que su papado sería breve, de “cuatro o cinco años”.
“Yo
tengo la sensación de que mi pontificado va a ser breve, cuatro o cinco
años, dos ya pasaron. Es como una sensación un poco vaga; capaz que no.
Es como la psicología del que juega y cree que va a perder para no
desilusionarse y si gana estar contento”, dijo.
Asimismo opinó
que su predecesor, Benedicto XVI, con su histórica renuncia en febrero
de 2013, “lo que hizo fue abrir una puerta”.
“Creo que lo que
hizo Benedicto con mucha valentía fue abrir la puerta de los papas
eméritos. (A) Benedicto no hay que considerarlo como una excepción, sino
como una institución”, apuntó Bergoglio.
DIARIO LIBRE
0 Comentarios